Francisco Ortega Alba ha
sido Catedrático de Geografía de la Universidad de Granada y Director del
Colegio Universitario de Almería. Como geógrafo, ha publicado varios libros y
numerosos artículos en revistas especializadas.
Ha participado o participa en diversas tertulias literarias de la capital
granadina: del Salón, del Hotel Carmen (Juglares del S. XXI), del Continental,
etc. También ha colaborado con diferentes compañías teatrales musicando sus
producciones.
Actúa como rapsoda, cantante, actor de teatro leído y cantaor en el Centro
Artístico de Granada y el Coro García Lorca del mismo, así como en diferentes
centros cívicos. Participó como cantaor en el XXXVII Festival de Cante Hondo
del Zaidín (2013).
Ha publicado el libro de poemas
El cerco de los amores
muertos y ha participado en los poemarios colectivos
Todo es Poesía en Granada y
Dekaritmos.
Los dibujos crecen
ResponderEliminarEstupendos dibujos. Son acuarela?
ResponderEliminarSon técnica mixta entre acuarela y lápices de colores.
EliminarMuy bien, amigo. Con el cagua me recuerda a Sherlos Holmes, claro, salvando las libras de diferencia.
ResponderEliminarAbrazo
No entiendo lo que quieres decir y a qué te refieres...¿con qué cagua? ¿y Sherlos Homes por qué?
ResponderEliminarHombre, cagua, quiere decir —en buen cubano— sombrero.
ResponderEliminaraaah, ¿pues a qué sombrero te refieres?
ResponderEliminarCómo que a qué sombrero...Hombre, que me falta el aire: no la vista. Me refiero al artículo que cubre tu cabeza en el dibujo que descansa sobre mi cabeza...o es un casco militar?
ResponderEliminar¿qué artículo cubre mi cabeza en el dibujo que descansa sobre la tuya? ... me estás volviendo loco, loco, loco...
ResponderEliminarPerdón por meter baza, pero creo que el de la cagua, sombrero o artículo que cubre cabezas, no es Luis (Luvar).
ResponderEliminarGracias Bego. Pichy, vuelve a ver el dibujo a que aludes y verás quien es el que lleva un sombrero negro. Forma parte de la tertulia a la que asisto y su hijo es un gran pintor granaino que ha ganado una bienal de pintura en New York y su hija una gran violinista.
ResponderEliminarLe pinte este retrato porque su cara es muy peculiar y se lo regalé, y lo puso en FB, pero me lo devolvió porque no le parecía del todo bueno...(claro, con lo de su hijo)
EliminarAh! Ya, disculpas...es que como tiene el chivito...se me pareció a su Señoría. Claro, amigo, ya sé quien es, digo, si no vuelvo a equivocarme, no es el que te hizo el prólogo?: el destacado intelectual Don Francisco Ortega —que quiere enseñarte a escribir: y te niegas, se dignó a hacerte un Prólogo: y no te gustó...y, ahora lo pintas: mal pinta´o...mal agradecido que eres, hombre! Fíjate, que hasta la descendencia de Don Francisco heredó su buen gusto por las bellas artes, y tú...es que no tienes remedio! Has de estar a la sombra de este buen Señor: por aquello de que "al que a buen árbol se arrima: buena sombra lo cobija"
ResponderEliminarDios lo puso en tu camino, y no has aprovecha´o esta bendición. Mira, qué pintar mal a su Eminencia —ya has llenado la copa! Nada ganas con soberbia, inteligente sería que bajases la testa y recuperaras la amistad del Maestro. Seguro que, como gentil hombre, sabrá perdonar tus agravios e irreverencias. Hazme caso, amigo mío, ya me lo agradecerás.
Gracias Bego: un beso.
Abrazos, Maestro
Pues no creo yo que esté tan mal.Míralo ahora con el original debajo.
EliminarMirando el original: lo has retratado! Qué bien, amigo. Abrazo
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